Hoy seguimos con nuestra serie de entrevistas a miembros de nuestro Centro de Salesianos Cooperadores, con ANGELO FANCHI AGUADO:
Háblanos un poco de ti... ¿desde cuándo eres Salesiano Cooperador? ¿cómo viviste el día de tu Promesa?
Soy SSCC desde hace 6 años, si no me falla la memoria, junto a Mª Carmen Bonet y Rocío Medialdea; lo que recuerdo de ese día, aparte de una gran felicidad por haber llegado a culminar un proceso de crecimiento en mi vida, de madurez, de sentirme salesiano, es lo nervioso que me encontraba de estar en primera fila con todo el mundo mirando (aunque eso se olvida a los 15 minutos de empezar porque me metí de lleno en la celebración), y también me acuerdo de que eché de menos a mi grupo de siempre, al que hizo conmigo el aspirantazgo, que por unas razones o por otras ese día no estaban a mi lado, sino detrás de mi.
¿Qué es lo que más valoras de tu vocación de salesiano cooperador?
Pues que como dice el salmo…aunque pase por valles oscuros, ningún mal temeré; aunque me encuentre con dificultades dentro y fuera de la comunidad, mi vacación no la pierdo, mis ganas no se pierden, pueden quedarse en standby, adormecidas, pero siempre me “pica” un algo, que me hace girar la cabeza. Eso sin duda lo da la vocación
¿Qué persona o personas son o han sido especialmente significativas para ti en tu vocación? ¿por qué?
Sin lugar a dudas mis padres, porque desde que empecé mi proceso formativo han sido una referencia, un apoyo, una meta si quieres decirlo así, ellos representan muchas cosas tanto en mi vida diaria como en mi vida de SSCC. Mencionar también a mi padrino de conformación que de una u otra forma siempre ha estado ahí y los amigos del centro, aquellos que han estado cerca en los buenos y malos momentos.
¿Qué es lo que más te gusta de nuestro Centro?
Que tiene la capacidad de aglutinar a gente con pensamientos muy diferentes, de edades muy diferentes y de convicciones muy diferentes, y aún así funciona y funciona bien, lo que evita siempre la sensación de estar fuera de sitio, ya que siempre encuentras alguien con pensamientos, opciones de vida, etc, etc, similares a los tuyos.
¿En qué crees que tendríamos que mejorar como comunidad?
Eso es tarea del consejo, que para eso es elegido, para mejorar la comunidad. Para mi lo básico es asistir, no solo a las reuniones de nuestros grupos pequeños, donde nos encontramos calentitos, con gente que tenemos afinidad, sino también en las reuniones del gran grupo, donde no solo se echa en falta realmente a alguna gente de manera física, sino que se echa en falta de manera intelectual.
Cuéntanos cuál es tu compromiso pastoral en este curso, cómo lo estás desarrollando, cómo te sientes, cómo marcha…
Mi compromiso pastoral no existente es ese mismo, no existe. No tengo tiempo. Y el poco tiempo que tengo es para mi, para mi familia y para mi novia, que se lo merece por aguantarme. Ni que decir tiene que me gustaría hacer algo, pero las cosas vienen como vienen.
A tu entender, ¿cuáles son las principales necesidades de los jóvenes de nuestra ciudad y cómo podríamos darles respuesta desde nuestro Centro?
Creo que los jóvenes están faltos de valores, de moral, de saber lo que hay o no hay que hacer. Y están saturados de entretenimiento, de actividades. Eso es lo que deberíamos de atacar, la forma de atraer a los chavales y a sus familias para darles eso, y que ellos se lleven lo que quieran, pero por lo menos tener la oportunidad de presentarle una vida y un mundo en lo que lo más importante no es hacer lo que me da la gana cuando me da la gana y donde el centro no soy yo, enseñando a convivir en familia, en “ver” a los demás. Es una idea
Y por último, cuéntanos alguna anécdota divertida que te haya ocurrido.
Soy SSCC desde hace 6 años, si no me falla la memoria, junto a Mª Carmen Bonet y Rocío Medialdea; lo que recuerdo de ese día, aparte de una gran felicidad por haber llegado a culminar un proceso de crecimiento en mi vida, de madurez, de sentirme salesiano, es lo nervioso que me encontraba de estar en primera fila con todo el mundo mirando (aunque eso se olvida a los 15 minutos de empezar porque me metí de lleno en la celebración), y también me acuerdo de que eché de menos a mi grupo de siempre, al que hizo conmigo el aspirantazgo, que por unas razones o por otras ese día no estaban a mi lado, sino detrás de mi.
¿Qué es lo que más valoras de tu vocación de salesiano cooperador?
Pues que como dice el salmo…aunque pase por valles oscuros, ningún mal temeré; aunque me encuentre con dificultades dentro y fuera de la comunidad, mi vacación no la pierdo, mis ganas no se pierden, pueden quedarse en standby, adormecidas, pero siempre me “pica” un algo, que me hace girar la cabeza. Eso sin duda lo da la vocación
¿Qué persona o personas son o han sido especialmente significativas para ti en tu vocación? ¿por qué?
Sin lugar a dudas mis padres, porque desde que empecé mi proceso formativo han sido una referencia, un apoyo, una meta si quieres decirlo así, ellos representan muchas cosas tanto en mi vida diaria como en mi vida de SSCC. Mencionar también a mi padrino de conformación que de una u otra forma siempre ha estado ahí y los amigos del centro, aquellos que han estado cerca en los buenos y malos momentos.
¿Qué es lo que más te gusta de nuestro Centro?
Que tiene la capacidad de aglutinar a gente con pensamientos muy diferentes, de edades muy diferentes y de convicciones muy diferentes, y aún así funciona y funciona bien, lo que evita siempre la sensación de estar fuera de sitio, ya que siempre encuentras alguien con pensamientos, opciones de vida, etc, etc, similares a los tuyos.
¿En qué crees que tendríamos que mejorar como comunidad?
Eso es tarea del consejo, que para eso es elegido, para mejorar la comunidad. Para mi lo básico es asistir, no solo a las reuniones de nuestros grupos pequeños, donde nos encontramos calentitos, con gente que tenemos afinidad, sino también en las reuniones del gran grupo, donde no solo se echa en falta realmente a alguna gente de manera física, sino que se echa en falta de manera intelectual.
Cuéntanos cuál es tu compromiso pastoral en este curso, cómo lo estás desarrollando, cómo te sientes, cómo marcha…
Mi compromiso pastoral no existente es ese mismo, no existe. No tengo tiempo. Y el poco tiempo que tengo es para mi, para mi familia y para mi novia, que se lo merece por aguantarme. Ni que decir tiene que me gustaría hacer algo, pero las cosas vienen como vienen.
A tu entender, ¿cuáles son las principales necesidades de los jóvenes de nuestra ciudad y cómo podríamos darles respuesta desde nuestro Centro?
Creo que los jóvenes están faltos de valores, de moral, de saber lo que hay o no hay que hacer. Y están saturados de entretenimiento, de actividades. Eso es lo que deberíamos de atacar, la forma de atraer a los chavales y a sus familias para darles eso, y que ellos se lleven lo que quieran, pero por lo menos tener la oportunidad de presentarle una vida y un mundo en lo que lo más importante no es hacer lo que me da la gana cuando me da la gana y donde el centro no soy yo, enseñando a convivir en familia, en “ver” a los demás. Es una idea
Y por último, cuéntanos alguna anécdota divertida que te haya ocurrido.
Esta pregunta no me queda muy clara….pero imaginando que se refiere a mi vida de SSCC…no tengo más remedio que hacer referencia a los fantásticos campamentos de SSCC en los que en pleno mes de agosto me envolvieron en 4 mantas para camuflarme en la piscina de Antequera y aquello no fue pasar calor, fue lo siguiente. Y cómo no, ese campamento en el ya mítico partido de… no sé a lo que jugábamos la verdad… donde Rafa Rodero y yo nos dimos un achuchón como los hombres, je, je ¿te acuerdas?...
Vaya si me acuerdo… todavía me duele pensarlo… Por cierto, era algo así como futbol-rugby pero más a lo bestia... ¡MUCHAS GRACIAS! Sigue siendo fiel al Centro… y ya encontraremos algo para que puedas entregarte a los jóvenes pese al poquísimo tiempo que te deja el trabajo.
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